Décadas de 1970 y 2000: suitcases con ruedas
Las primeras patentes para equipaje con ruedas y maletas con ruedas se concedieron en 1887 y 1945 respectivamente, y en la década de 1940 se publicaron en periódicos británicos diseños para un “portátil portero” (un dispositivo con ruedas que podía acoplarse a una maleta). Sin embargo, ninguno de estos diseños tuvo éxito inicialmente. Durante su segunda gira mundial en 1928, la artista estadounidense Anita Willets-Burnham hizo la primera maleta con ruedas de la que se tiene constancia, que tenía dos ruedas de cochecito y un asa telescópica de madera.
Década de 1980-2000: patinetes y otras innovaciones
El Rollaboard o roll-aboard (también conocido como rollerboard, llamado “eggcorn”) es una maleta de ruedas vertical con dos ruedas en la parte inferior y un asa telescópica, inventada por el piloto de 747 de Northwest Airlines Robert Plath. 1987. La idea se le ocurrió durante una escala en un hotel de Escandinavia, cuando vio que los pasajeros se esforzaban por sacar su equipaje del carro portaequipajes, que estaba sujeto con cuerdas elásticas.
Hizo un prototipo del Rollaboard en su garaje, atornilló una bolsa rígida al carro de equipaje y empezó a recibir ideas de otros empleados mientras lo llevaba de un lado a otro. Fue un cambio con respecto al modelo Sardo, que se desplazaba sobre cuatro ruedas. Al principio, Plath sólo vendía el Rollaboard a otros pilotos y auxiliares de vuelo, y en diciembre de 1989 construyó y vendió 100 maletas a varias tripulaciones.
En 1991, Plath abandonó Northwest Airlines y fundó Travelpro, una empresa de equipajes en Deerfield Beach (Florida), que inicialmente sólo vendía a otras tripulaciones de vuelo.
En 1992 contrató a un equipo de representantes de ventas y, a mediados de los noventa, Travelpro empezó a vender comercialmente Rollaboard en tiendas minoristas, lo que la convirtió en competidora de Samsonite, entonces el mayor fabricante estadounidense de maletas.
Plath vendió Travelpro en 1999, y el Rollaboard fue ampliamente copiado por otras empresas de equipaje a partir de 1993, lo que llevó a una rápida y casi completa sustitución de los diseños de Sadow. Don Ku, un diseñador de Flushing, Queens, inventó y patentó una maleta con asa retráctil en 1993.
En 2004, Suntory empezó a vender la primera maleta “con cardán”, que tenía cuatro ruedas que podían moverse y girar en cualquier dirección. A medida que las maletas se hacían más ligeras, las pruebas de durabilidad se hacían más rigurosas.
Desde 2010: Equipaje inteligente
En la década de 2010 se popularizó el equipaje inteligente, es decir, el equipaje con funciones tecnológicas incorporadas. Estas características incluyen seguimiento interno, geolocalización, escáneres de huellas dactilares, carga de dispositivos, básculas, capacidades GPS, interruptores táctiles, cierre remoto y visión por ordenador. Empresas como Away, Arlo Skye y Ovis venden principalmente maletas inteligentes. La mayoría de las maletas inteligentes funcionan con baterías de iones de litio.
Después de que varias baterías de iones de litio de maletas inteligentes explotaran y se incendiaran en la bodega de carga de un avión, la Asociación de Transporte Aéreo Internacional clasificó las baterías como “mercancías peligrosas”. La organización emitió en mayo de 2017 una recomendación a sus aproximadamente 275 miembros (entre ellos United, JetBlue y Virgin Atlantic) para que impusieran restricciones al equipaje inteligente con baterías no extraíbles.
Aerolíneas estadounidenses como American Airlines, Alaska Airlines y Delta Air Lines prohibieron facturar maletas inteligentes con baterías no extraíbles a finales de 2017 y principios de 2018, mientras que la Autoridad de Aviación Civil del Reino Unido recomendó una prohibición similar en 2018. Empresas de maletas inteligentes como Bluesmart han cerrado como consecuencia de estas prohibiciones.